La gestión y el control de la energía son instrumentos importantes para monitorizar la demanda energética de los edificios. Una buena gestión energética es necesaria en inmobiliario público y edificios funcionales,
como
hospitales, edificios de la policía y grandes almacenes. Las ciudades y los municipios controlan el consumo de sus escuelas, ayuntamientos, piscinas y salas polivalentes como parte de la gestión energética municipal. El aumento de la eficiencia energética no sólo alivia la carga de las arcas municipales, sino que también contribuye a proteger el medio ambiente.
Adquisición, evaluación y visualización de datos
La gestión eficiente de la energía comienza con la adquisición, la visualización y el análisis del consumo energético actual de los inmuebles. Analizamos tanto el consumo agregado como los perfiles de carga eléctrica y de calefacción. A continuación, se presenta un concepto de ahorro energético que incluye también posibles estrategias de suministro a través de plantas de cogeneración (CHP) o plantas termosolares, así como valoraciones acerca del funcionamiento óptimo de estas plantas.
Para el subsiguiente control energético, se comprueban los objetivos previstos y se corrigen si es necesario.