La trituradora de mandíbulas aplasta las piedras con la fuerza de alta presión que aplica al material. La presión mecánica se aplica mediante las dos mandíbulas de la trituradora. Gracias a este flujo de movimiento elíptico, el material a triturar es aplastado y cae bajo la influencia de la gravedad a través del hueco en forma de cuña entre las dos mandíbulas. Este hueco se denomina hueco de trituración y puede ajustarse en función del tamaño deseado del producto.
Puede triturar materiales de cualquier dureza.
Gracias al mecanismo de la trituradora de mandíbulas, que ejerce una gran presión mecánica creada por dos mandíbulas, una de las cuales es fija y la otra realiza un movimiento elíptico, puede triturar fácilmente piedras grandes de cualquier dureza. Gracias a esta característica, es el tipo de trituradora preferido en las plantas de trituración y cribado.
El movimiento elíptico lo proporciona la excentricidad del eje al que está unida la mandíbula móvil. Este movimiento elíptico creado permite fragmentar el material entre la mandíbula fija y la móvil.
Alto rendimiento
Gracias al diseño de la cámara de trituración de las trituradoras de mandíbulas, incluso en minas con alta abrasividad, se produce un menor desgaste en comparación con las trituradoras de impacto. De este modo, las trituradoras de mandíbulas ofrecen un rendimiento de trabajo duradero. Las trituradoras de mandíbulas permiten procesar materiales más grandes que las trituradoras de impacto. Además, trabajan con una gran capacidad a bajas potencias de motor. Esto garantiza una alta eficiencia de trabajo.
Facilidad de mantenimiento
Las trituradoras de mandíbulas no requieren un mantenimiento diario, salvo la lubricación. Por lo tanto, los costes de mantenimiento son muy bajos. Las piezas de desgaste pueden utilizarse durante mucho tiempo.
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