Filtros a presión para la eliminación final de sólidos en suspensión, olores, color y metales.
Los filtros a presión (con arena, carbón activado, zeolita u otros medios filtrantes) aseguran un efluente de alta calidad mediante un proceso sencillo y fiable.
El flujo es forzado a través del lecho filtrante por la bomba de alimentación. El flujo es continuo hasta que la presión diferencial entre el lado de alimentación y el de descarga alcanza un determinado nivel.
El aumento de presión se debe a la obstrucción del material filtrante. En caso de que el material tenga un ciclo de vida limitado, puede ser retirado y sustituido por material nuevo. La alta velocidad de filtración permite disponer de instalaciones con un espacio más reducido en comparación con los sistemas gravitacionales.
Separar los sólidos suspendidos microscópicos.
Eliminar los olores.
Eliminar colores.
Eliminar el Hierro.
Eliminar el manganeso.
Los filtros a presión se utilizan tanto para el agua residual como para el agua potable.
Los sistemas pueden ser automatizados y se suministran con válvulas de accionamiento neumático o eléctrico
La amplia gama permite disponer de una unidad adecuada para cada aplicación.
De 4 a 70 m3/h
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