El sensor de nivel RIL700-1V tiene la ventaja de eliminar los residuos de espuma en el electrodo y está diseñado para garantizar una detección fiable del límite de nivel para una amplia gama de fluidos, materiales densos y pastas. Gracias a su versatilidad, puede utilizarse con líquidos, ácidos, bases, alcohol, amoníaco, acetona, cloro y muchos otros, incluso a temperaturas extremas de hasta -20°C.
Una de las características más significativas del sensor RIL700-1V es su resistencia a la adherencia de sustancias viscosas y pegajosas, lo que significa que el sensor sigue siendo eficaz y preciso incluso en presencia de materiales que tienden a acumularse en las superficies de detección.
El dispositivo está diseñado para sustituir a los sensores de nivel de vibración tradicionales, ofreciendo un rendimiento superior y resultados más precisos. Además, cuenta con una función exclusiva denominada "Ventana de medios", en la que el sensor sólo responde al conjunto de medios específico, ignorando las sustancias con menor o mayor permitividad. Esta función resulta especialmente ventajosa para diferenciar entre diversos materiales en el depósito o contenedor, como distinguir el aceite del agua o el aire, o detectar sólo la espuma de una bebida como la cerveza ignorando la cerveza y el aire circundante.
La instalación del sensor RIL700-1V puede realizarse directamente en depósitos, contenedores, pozos, tubos y otros recipientes, lo que simplifica considerablemente el proceso de instalación. Además, los ajustes del sensor pueden configurarse mediante un lápiz magnético, lo que hace que la gestión y la calibración del dispositivo sean fáciles y accesibles.
El sensor RIL700-1V funciona a altas frecuencias, lo que permite una detección fiable del nivel de fluido y elimina los depósitos o la espuma en el electrodo.
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