Los ventiladores centrífugos de alta temperatura se utilizan para el transporte de grandes volúmenes de aire con bajas presiones y son adecuados para la aspiración de humos, aire viciado, polvoriento y húmedo en fundiciones, fábricas de cemento, fábricas de papel y talleres de carpintería. Las centrífugas de alta temperatura también son ampliamente utilizadas para la ventilación de lugares públicos y el secado de papel en aplicaciones tales como radiadores y torres de enfriamiento.
Los ventiladores centrífugos de alta temperatura se fabrican con materiales resistentes específicos o con sistemas de refrigeración, por lo que estos ventiladores garantizan el funcionamiento en condiciones ambientales extremas.
Tipos
Rimor ofrece ventiladores con acoplamiento directo, sin correas y adaptables a temperaturas de hasta 1000°C.
Hasta 500°C sin correas
Rimor ha desarrollado un disipador de calor específico capaz de disiparse a temperaturas de hasta 500°C si se coloca en el eje. El disipador de calor es de aluminio y permite la fabricación de ventiladores centrífugos para altas temperaturas de funcionamiento.
Hasta 1000°C
Rimor dispone de los conocimientos técnicos necesarios para la refrigeración de pozos de agua y de pozos de aire comprimido, por lo que fabrica ventiladores centrífugos aptos para trabajar con temperaturas de proceso de hasta 1000°C con refrigeración por aire comprimido o por agua.
Fabricación Rimor
Los materiales disponibles son AISI 309, AISI 310 S, con procesos de temple específicos. La gama disponible es para ventiladores con dimensiones de rodete de hasta 1000 mm de H2O y capacidades instaladas de hasta 75 kW.
Para estos ventiladores, Rimor propone también una solución aislante multicapa que reduce la temperatura superficial del ventilador, algo que es necesario para la seguridad de los trabajadores.
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