Inventadas por Bosch en 1976, las sondas Lambda han contribuido significativamente a cumplir las normas de emisiones actuales. Hasta la fecha, Bosch ha producido más de mil millones de sondas Lambda.
Al medir el contenido de oxígeno de los gases de escape, la sonda Lambda proporciona la información necesaria para la mezcla correcta de aire y combustible a la unidad de control del motor y favorece una combustión potente del mismo.