La separación inercial es un excelente sistema de prefiltración, particularmente adecuado en ambientes con alta concentración de polvo como zonas desérticas, minas, fábricas de acero y fundición, industrias cementeras.
Este sistema de filtración se basa en el principio de conservación de la energía cinética de las partículas de polvo en el aire. Gracias a una serie de rápidos cambios de dirección, mientras se emplea el flujo de aire limpio en el proceso, a través de la inercia las partículas continúan moviéndose en línea recta hasta llegar a la tolva de descarga. Allí, gracias a un pequeño volumen de aire manejado por un ventilador de purga (alrededor del 10% del volumen total de aire de entrada), las partículas son expulsadas al exterior.
Obviamente, cuanto mayor es la masa de las partículas manipuladas y la velocidad a través de la cual son transportadas, mayor es la eficiencia de un filtro de inercia. En cualquier caso, la eficacia del sistema de filtrado se basa en el correcto funcionamiento del ventilador de purga.
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