La autoclave Shaka™ usa una tecnología revolucionaria y patentada que abre nuevos horizontes para la indústria agroalimentaria.
Con este nuevo sistema, los envases son sacudidos entre 100 y 150 veces por minuto mientras la corriente de agua sigue fluyendo como en una autoclave Steriflow estándar. Las transferencias de calor son altamente mejoradas, lo que permite obtener el valor esterilizante deseado en un tiempo record. Comparado con los sistemas clásicos, el Shaka preserva las propiedades organolépticas del producto (mejor sabor, mejor color, contenido en vitaminas más alto…).