Instrumento para controlar la calidad del aire interior. Recomendado para luchar contra el COVID-19.
Mide la concentración de dióxido de carbono (CO2), la temperatura y la higrometría de una habitación: una alarma sonora y visual avisa cuando se supera el umbral.
El sensor de CO2 (dióxido de carbono) es un muy buen indicador del riesgo de infección. Al respirar en una habitación, las personas emiten CO2 que se acumula y aumenta el riesgo de infección por aerosoles (tuberculosis, COVID-19,...).
Gracias a su código de colores (verde, naranja, rojo) y a la alarma sonora, permite controlar la calidad del aire interior para ventilar la habitación regularmente y reducir así el riesgo de infección por COVID-19 u otra enfermedad.
Este sensor de CO2 trae una solución de prevención al decreto n° 2015-1000 del 17 de agosto de 2015 (Ley Grenelle medio ambiente 2) relativa a los métodos de vigilancia de la calidad del aire interior en ciertos establecimientos que reciben al público.
Producto profesional, tecnología NDIR (sensor infrarrojo no dispersivo).
Entregado con un cable USB-C. Adaptador de corriente opcional : 6057