La soldadura por láser es un proceso sin contacto que requiere el acceso a la zona de soldadura desde un solo lado de las piezas que se van a soldar. Los láseres producen un haz de luz de alta intensidad que, cuando se enfoca en un único punto, proporciona una fuente de calor concentrada, permitiendo soldaduras estrechas y profundas y velocidades de soldadura rápidas. La soldadura láser se utiliza con frecuencia en aplicaciones de gran volumen, como en las industrias médica y del automóvil.
Ventajas de los sistemas de soldadura por láser de fibra
Los sistemas de soldadura por láser de fibra no presentan las deficiencias en cuanto a potencia de salida, tamaño del punto y variaciones del punto focal causadas por los efectos térmicos sobre las varillas de vidrio de los soldadores láser nd:YAG tradicionales.
Los soldadores láser de fibra ofrecen una verdadera consistencia de soldadura en todos los niveles de potencia, en todas las secuencias de pulsos y durante toda la vida útil del láser. Los parámetros del láser siguen siendo predecibles y constantes. La razón de ello es que la generación y el transporte del haz láser a la pieza de trabajo se produce por completo dentro de los confines de una fibra monomodo. La conformación del haz que proporciona esta fibra no se degrada con el tiempo ni cambia con la potencia del láser, lo que también hace que el láser sea físicamente robusto y estable, por lo que resulta adecuado para los entornos industriales más exigentes.
Otras ventajas de los soldadores láser de fibra son el pequeño tamaño del punto y la alta calidad del haz, que se traducen en una alta irradiancia en el plano focal. Las estaciones de trabajo equipadas con soldadores láser de fibra pueden producir mejores resultados con niveles de potencia más bajos. El haz de energía focalizado afecta sistemáticamente a un área muy pequeña de metal, lo que proporciona la ventaja de que se genera muy poco calor alrededor del punto de soldadura.
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