RFID (IDentificación por Radio Frecuencia) se refiere a los sistemas de identificación de radiofrecuencia. Estas frecuencias oscilan entre 50 kHz y 2,5 GHz. El más utilizado es 13.56 MHz.
El sistema RFID permite realizar funciones de trazabilidad, identificación de objetos (seguimiento) y control de acceso.
La información se almacena en una memoria a la que se puede acceder mediante un simple enlace de radiofrecuencia. Esta memoria es en forma de una etiqueta electrónica, que contiene una antena y un circuito integrado. La etiqueta contiene la información asociada al objeto al que está fijada. Cuando una etiqueta entra en el campo generado por el lector/estación, detecta la señal e intercambia los datos (lectura o escritura) entre su memoria y el lector/estación.
Las aplicaciones son numerosas:
Logística: salida de mercancías, entrada de mercancías, tránsito, etc.
Seguimiento y clasificación de equipaje
Trazabilidad en la industria de procesamiento de alimentos
Líneas de montaje flexibles en el sector de la automoción
Cabinas automáticas de peaje
Control de acceso, etc.
El sistema RFID también es adecuado para su uso en entornos difíciles (humedad, temperatura, choque mecánico, vibración, polvo, etc.).