Los imanes permanentes se han vuelto indispensables en el mundo actual, centrado en la tecnología. Los diferentes materiales magnéticos y sus múltiples características han consolidado los imanes permanentes como elementos importantes en innumerables campos de aplicación. Además de los materiales probados de ferrita y AlNiCo, los imanes modernos se fabrican también con materiales de tierras raras como el neodimio-hierro-boro y el samario-cobalto. Incluso los pequeños imanes fabricados con estos materiales ofrecen una gran fuerza magnética y, por lo tanto, satisfacen la creciente demanda de imanes más pequeños y fuertes.
Los imanes permanentes también desempeñan un papel fundamental en el creciente campo de la tecnología de la automatización, donde es esencial continuar con el desarrollo de accionamientos, actuadores y sensores. Un salto particular en la dirección de las tecnologías del futuro fue el descubrimiento de los nuevos materiales samario-cobalto y neodimio-hierro-boro. Algunas de las aplicaciones más adecuadas son los productos que sólo pueden funcionar con imanes permanentes, como las bicicletas eléctricas, los accionamientos eléctricos en el sector del automóvil y los coches híbridos. La generación de energía verde a partir de la energía eólica e hidroeléctrica, así como otros tipos de generadores modernos, también depende del uso de imanes permanentes.
Imanes de ferrita duros
Las ferritas duras son los materiales magnéticos menos costosos y los más disponibles a nivel mundial. Son materiales cerámicos y, por tanto, muy duros y quebradizos.
En comparación con otros materiales metálicos, las propiedades magnéticas de los imanes permanentes de ferrita dura son bastante débiles. Sus ventajas son un coste menor y una mayor resistencia a la corrosión y a los productos químicos. Además, son fáciles de imantar y sirven para muchas aplicaciones diferentes.
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