Mejor control de la fermentación
Gracias a la combinación de la potencia térmica instalada es posible eliminar, desde las primeras horas de secado, una notable cantidad de agua del producto, incluso a una temperatura ambiente relativamente baja. Reduciendo así la actividad del agua se controla la fermentación y se elimina el peligro de la acidez.
Mínimo peligro de incrustación
El peligro de incrustación ha sido prácticamente eliminado debido a que la instalación es regulada por la humedad superficial del producto. De hecho, los períodos de trabajo durante los que el producto es secado por su cara externa, se alternan automáticamente con períodos de pausa que permiten al producto la liberación de la humedad desde el interior.
Regulación del aire
El sistema que ha ideado Travaglini está constituido por un conducto en forma de “T” donde se instala un actuador lineal que permite el movimiento de dos compuertas metálicas de aletas contrapuestas. Con respecto a los más simples e imprecisos sistemas de compuertas metálicas a bandera y actuador circular, esta solución ofrece la ventaja de una modulación de los flujos del aire de manera gradual. Además, un actuador lineal de nueva generación (también con opción de encoder), controlado por una tarjeta electrónica programable, permite:
• regular la velocidad de paso del flujo de aire en el local en sentido transversal, con el fin de alcanzar de modo más uniforme el producto;
• regular la velocidad de movimiento del actuador, de modo que permita al aire llenar correctamente, y de modo homogéneo, el conducto de impulsión para conseguir la misma cantidad de aire desde el primer hasta el último cono;