Insect Killer es una unidad de pulverización automatizada con un sistema de boquillas capaz de rociar grandes superficies con insecticidas o repelentes de insectos.
El sistema está fabricado con componentes de primera calidad y permite regular con precisión la concentración de producto a pulverizar.
El módulo de control permite automatizar el proceso de pulverización, con programas diarios y semanales.
La estructura compacta es de acero inoxidable y el módulo de control está incorporado en un cuadro eléctrico con protección IP65, accesible desde el exterior.
Insect Killer es muy fácil de usar, una vez identificada la zona a pulverizar, se construye un sistema de distribución con una manguera especial de PTFE, que incluye cada 1,5 m un práctico empalme en T en el que se instalará una boquilla de micropulverización con sistema antigoteo.
Insect Killer es el único sistema que permite el control automático de dos zonas de pulverización, cada una de hasta 120 m de longitud con un máximo de 80 boquillas
Las zonas de pulverización pueden programarse independientemente y pueden solaparse, el sistema no puede controlar más de 80 boquillas al mismo tiempo, de lo contrario no puede garantizarse la nebulización correcta del producto.
A continuación se conecta el equipo a la red de agua y la salida a los conductos de pulverización, se introduce el producto a pulverizar en el depósito y se programan las horas y días de funcionamiento.
En este punto, Insect Killer, es capaz de realizar todo el ciclo de distribución de forma automática.
Insect Killer también puede funcionar manualmente.
La pantalla del módulo de control visualiza las distintas fases de funcionamiento del sistema y las posibles alarmas de nivel cuando se agota el agua o el producto.
Estas últimas van acompañadas de una señal acústica.
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