Las lavadoras de arena CLSW se utilizan para separar la arena de las aguas residuales lavándolas al mismo tiempo para reducir la cantidad de partículas orgánicas. A continuación, la arena se transporta y se descarga mediante un transportador de tornillo.
Las lavadoras de arena CLSW se utilizan para separar la arena de las aguas residuales, lavándolas al mismo tiempo para reducir la cantidad de partículas orgánicas. A continuación, la arena se transporta y se descarga mediante un transportador de tornillo.
La mezcla de agua y arena cae en el tanque de forma troncocónica donde se esparce gracias a la presencia de un agitador giratorio. Durante la mezcla se utiliza agua de lavado que ayuda a separar las partículas orgánicas del efluente. El agua de lavado se introduce a través de un manguito conectado con una electroválvula y un caudalímetro que controla el flujo de entrada. La base del tanque tiene un doble fondo cuya parte superior está equipada con orificios para el flujo del agua de lavado.
El agitador mantiene la arena en movimiento y la transporta hacia la abertura central del tanque con conexión al transportador de tornillo. Su diferente densidad hace que las partículas orgánicas floten y que la arena con un tamaño de grano superior a 200 μm caiga al fondo del tanque. El agua limpia fluye a través de un vertedero situado en el interior del tanque que está conectado a un transportador de tornillo con un ángulo de inclinación de 45 grados. El transportador de tornillo reduce el lecho de arena dentro de la tolva de entrada mientras transporta la arena lavada hacia la salida.
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